Diseño arquitectónico y sus elementos principales

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El diseño arquitectónico es un proceso creativo y técnico que implica la planificación, diseño y concepción de espacios construidos con una funcionalidad, estética y sostenibilidad equilibradas. Como arquitecto, puedo afirmar que el diseño arquitectónico va más allá de la creación de meros planos o estructuras; es un arte de integrar el espacio, la forma y el entorno para satisfacer las necesidades y deseos de los usuarios, al tiempo que se consideran factores como la historia, el contexto cultural y el medio ambiente.

En la práctica, el diseño arquitectónico comienza con la comprensión de las necesidades del cliente y del sitio de construcción. Este proceso incluye la investigación y el análisis del entorno, el clima, la historia y las regulaciones locales. Se desarrollan conceptos iniciales que se refinan gradualmente en diseños detallados, incluyendo planos, elevaciones y secciones, que son esenciales para la construcción.

diseño arquitectónico

El diseño arquitectónico también implica una consideración cuidadosa de los aspectos estructurales, los sistemas de servicios (como electricidad y plomería), la eficiencia energética y la sostenibilidad. El objetivo es crear edificios y espacios que no solo sean funcionales y seguros, sino también armoniosos con su entorno y enriquecedores para sus ocupantes.

Por lo tanto, el diseño arquitectónico es una disciplina que combina creatividad, ciencia, tecnología y humanismo, desempeñando un papel crucial en la forma en que interactuamos con los espacios que nos rodean y cómo estos espacios configuran nuestras experiencias diarias.

El arquitecto encargado de un diseño arquitectónico debe abordar la tarea de analizar, diseñar y construir edificaciones y complejos tanto urbanos como rurales, alineándose con las necesidades y recursos de la sociedad. Este proceso implica la creación de espacios con características estéticas y técnicas que cumplan con los requisitos y normativas de la industria de la construcción, donde los seres humanos puedan realizar actividades como vivir, trabajar, descansar, entre otras..

Es esencial que el diseño arquitectónico refleje, interprete y resuelva de manera artística y técnica todas las facetas de la vida o necesidades humanas.

Antes de ejecutar el proyecto arquitectónico, es necesario pasar por una serie de pasos, con el fin de atender el estilo de vida de los residentes, garantizar la seguridad y seguir las normas técnicas del sector.

Definición de diseño arquitectónico

El diseño arquitectónico es una especialización dentro del diseño técnico orientada a la ejecución y representación de proyectos de arquitectura. Estos registros son hechos por arquitectos o diseñadores y tienen como objetivo estandarizar y orientar la ejecución de proyectos.

El diseño arquitectónico, desde la perspectiva de un arquitecto, se define como el proceso de planificar, diseñar y concebir espacios construidos que armonizan funcionalidad, estética y sostenibilidad. Este proceso va más allá de la mera creación de planos estructurales, abarcando la integración artística y técnica del espacio, la forma y el entorno para satisfacer las necesidades y deseos de los usuarios, al tiempo que se consideran aspectos clave como el contexto histórico, cultural y ambiental. El diseño arquitectónico es una disciplina que combina creatividad, ciencia, tecnología y humanismo, jugando un papel crucial en la manera en que las personas interactúan y experimentan los espacios que habitan.

Planos de Diseño
Equipo de Arquitectura Colaborando en el Desarrollo de Planos de Diseño

Historia del diseño arquitectónico

A lo largo de la historia, el diseño arquitectónico ha sido una disciplina fundamental que combina funcionalidad, estética y sostenibilidad en la creación de espacios y estructuras. Este proceso creativo y técnico ha experimentado una evolución significativa desde sus orígenes en antiguas civilizaciones hasta la arquitectura contemporánea, reflejando en cada etapa los valores, creencias y aspiraciones de la sociedad.

Inicialmente, el diseño arquitectónico se centró en satisfacer necesidades básicas de refugio y seguridad, utilizando recursos y técnicas disponibles localmente. Sin embargo, con el tiempo, evolucionó para convertirse en una expresión cultural y un reflejo de las sociedades que lo crearon. En civilizaciones como la egipcia, griega y romana, el diseño y la construcción de edificaciones se basaban en tradiciones y técnicas heredadas, pero fue durante el Renacimiento cuando el diseño arquitectónico comenzó a diferenciarse como una disciplina estructurada y teóricamente fundamentada. Este período marcó un renacer del interés por la geometría, la proporción y la simetría inspiradas en la antigüedad clásica, aunque aún sin una normalización rigurosa en la geometría descriptiva.

El diseño arquitectónico surgió en el Renacimiento
El diseño arquitectónico surgió en el Renacimiento

El impacto de la Revolución Industrial en el diseño arquitectónico fue transformador, impulsando la necesidad de normalización y precisión ante el desarrollo de nuevas tecnologías y materiales de construcción. Esto no solo facilitó procesos de diseño y construcción más eficientes y seguros, sino que también cambió radicalmente la concepción y utilización de los espacios urbanos y residenciales.

Durante la Edad Media, el foco del diseño arquitectónico se centró principalmente en estructuras religiosas, demostrando el dominio de la Iglesia y la espiritualidad en la vida cotidiana a través de catedrales y monasterios majestuosos. El Renacimiento, sin embargo, reintrodujo y revalorizó los principios clásicos de la arquitectura, promoviendo un enfoque más académico del diseño arquitectónico. Los arquitectos de esta época empezaron a ser vistos no solo como constructores, sino como verdaderos artistas y pensadores.

Los avances del siglo XIX y la era moderna trajeron consigo innovaciones materiales y constructivas que permitieron explorar nuevas formas arquitectónicas, respondiendo a las demandas de una sociedad industrializada y urbana. La arquitectura moderna y contemporánea ha continuado esta exploración, enfrentándose a desafíos como la sostenibilidad y la integración ambiental, y aprovechando las tecnologías digitales para innovar en diseño y construcción.

Elementos del diseño arquitectónico

Desde la perspectiva del arquitecto, la comprensión de los elementos del diseño arquitectónico es fundamental para la creación de espacios que no solo respondan a las necesidades funcionales sino que también enriquezcan la experiencia humana y contribuyan al entorno construido. Estos elementos actúan como los componentes básicos de cualquier proyecto arquitectónico, guiando a los diseñadores en el proceso creativo y técnico de dar forma al espacio habitable. A continuación, se describen los elementos cruciales del diseño arquitectónico.

1. Espacio

El espacio es el núcleo del diseño arquitectónico. Es el vacío o el área utilizable dentro de una estructura donde ocurren las actividades humanas. Un arquitecto calificado manipula el espacio a través de dimensiones, formas y la organización del flujo para satisfacer las necesidades específicas del proyecto, creando ambientes que faciliten las funciones para las que fueron concebidos.

2. Forma

La forma se refiere a la configuración física de la estructura, resultante de la combinación de diversos elementos como líneas, superficies y volúmenes. La forma es fundamental para expresar el estilo y la estética de un edificio, y es a menudo influenciada por consideraciones funcionales, estructurales, culturales y ambientales.

3. Función

La función implica el propósito de un edificio o espacio. En diseño arquitectónico, la función dicta la forma y la organización espacial, asegurando que el edificio sirva efectivamente a sus usuarios. La planificación funcional cuidadosa asegura la eficiencia, la comodidad y la accesibilidad del espacio.

4. Luz

La luz, tanto natural como artificial, es un elemento vital que influye en la percepción y el ambiente de los espacios arquitectónicos. Los arquitectos utilizan la luz para destacar formas y texturas, crear atmósferas, y promover el bienestar de los ocupantes.

5. Color

El color tiene el poder de transformar espacios, influir en el estado de ánimo y la percepción, y comunicar identidad. En el diseño arquitectónico, el color se emplea estratégicamente para complementar la forma y el espacio, y para armonizar con el entorno construido y natural.

6. Textura

La textura se refiere a la calidad de la superficie de los materiales utilizados en la construcción. Puede ser visual o táctil y juega un papel crucial en el carácter y la experiencia sensorial de un espacio, influenciando la percepción de escala, distancia y solidez.

7. Materiales

Los materiales no solo determinan la apariencia y la textura de un edificio, sino también sus propiedades térmicas, acústicas y de durabilidad. La selección de materiales adecuados es esencial para el desempeño funcional y la sostenibilidad del diseño arquitectónico.

8. Tecnología

La integración de tecnología en el diseño arquitectónico permite innovaciones en la construcción, la sostenibilidad y la interacción del usuario con el espacio. La tecnología influye en la manera en que se diseñan, construyen y operan los edificios, abriendo nuevas posibilidades para soluciones creativas y eficientes.

Cada uno de estos elementos del diseño arquitectónico contribuye a la creación de espacios que no solo cumplen con requisitos funcionales y técnicos, sino que también promueven la calidad de vida y el bienestar de sus usuarios. Como arquitectos y educadores, es nuestra responsabilidad fomentar una comprensión profunda de estos principios fundamentales, preparando a las futuras generaciones para abordar los desafíos del diseño con una visión holística y humanista.

En el ámbito del dibujo, los elementos gráficos como líneas, trazos, curvas, círculos, rectángulos y símbolos juegan un papel fundamental en la concepción y representación de ideas. Entre estos, las líneas se destacan como el principal elemento, ya que definen la forma, dimensión y posicionamiento de componentes esenciales en cualquier proyecto, tales como paredes, puertas, ventanas, pilares y vigas. La correcta interpretación y uso de las líneas, con sus diversos grosores y estilos, permiten transmitir información específica sobre los elementos estructurales y no estructurales dentro de un diseño.

Las líneas fuertes, por ejemplo, se utilizan para representar paredes y elementos estructurales visibles en cortes arquitectónicos, destacando su importancia y solidez. Las líneas de grosor medio, por otro lado, indican elementos en vista, incluyendo aquellos situados por debajo o por encima del plano de corte, como mobiliario, soleras y vanos de aberturas, entre otros. Las líneas delgadas, en contraste, son empleadas para detallar texturas, revestimientos y dimensiones, facilitando la comprensión de los materiales y las medidas específicas del proyecto.

Además de las líneas, el diseño arquitectónico se enriquece con el uso de perspectivas, vistas y escalas, tríada indispensable para la representación bidimensional de estructuras tridimensionales. La perspectiva, en particular, brinda a quien observa el dibujo una comprensión de la altura, profundidad y ancho del objeto representado. Dentro del diseño arquitectónico, la perspectiva cónica es la más utilizada, permitiendo una representación más cercana a cómo percibimos el mundo real, con variaciones que incluyen uno, dos o tres puntos de fuga, cada una con sus propias reglas de construcción.

Las vistas o proyecciones ortográficas, como las frontales, superiores y laterales, permiten una representación detallada y precisa de los objetos desde diferentes ángulos, facilitando una comprensión integral del diseño. La escala, por último, asegura que estas representaciones mantengan una proporción adecuada respecto a las dimensiones reales del objeto, siendo esencial para la interpretación correcta de los planos y para la realización efectiva del proyecto.

El proceso de diseño arquitectónico

Para realizar el proceso de diseño arquitectónico hay mucho que conocer, razonar y proponer. Cada vez que alguien nos pide que realicemos un diseño nos hacemos muchas preguntas.

Tenemos mucho en qué pensar, son muchos los aspectos que relacionar, hay muchas decisiones que tomar.

El proceso de diseño arquitectónico 2

Las primeras preguntas para realizar un proceso de diseño arquitectónico son:

  • ¿Para quién será la obra?
  • ¿Quién la utilizará?
  •  ¿En dónde estará ubicada?
  •  ¿Qué actividades se realizarán en ella?
  •  ¿Con qué recursos financieros y tecnológicos se cuenta para construirla?

Con nuestro diseño procuraremos dar una respuesta adecuada a las necesidades físicas y psicológicas de las personas que utilizarán la obra arquitectónica, pero también tendremos que lograr que dicho diseño de relaciones armoniosamente con el entorno, que no dañe el medio ambiente ni desperdicie energía.

El diseño arquitectónico se desarrolla a través de un proceso que se inicia con el conocimiento de determinadas necesidades concretas de alojamiento, y termina con la propuesta gráfica de cómo se resolverán dichas necesidades. Con el proyecto nos proponemos expresar de manera anticipada cómo será la obra.

Decimos que el diseño de un proyecto se desarrolla mediante un proceso porque pasamos por una serie de fases sucesivas y por muchos tanteos que nos van aproximando a la solución final.

Generalmente, lo primero que hacemos para empezar con el proceso de diseño arquitectónico es conocer a las personas que utilizarán la obra a diseñar y preguntarles qué necesidades arquitectónicas tienen y con qué recursos cuentan. Es importante conocer bien sus necesidades, deseos, costumbres e ideas para hacer un diseño que responda a sus requerimientos y expectativas. Lo siguiente es conocer el lugar en donde se ubicará la obra, en el caso de que dichas personas ya tengan elegido un lugar. De no ser así, podemos ayudarles a elegir un sitio adecuado.

El proceso de diseño arquitectónico

El arquitecto, al diseñar, parte de la necesidad de las personas que utilizarán la obra arquitectónica, de las características del lugar en donde esta se construirá y de los recursos materiales y técnicos con los que se cuenta. Por supuesto que los gustos del arquitecto también intervienen en su creación porque cada uno tiene sueños, recuerdos y experiencias que quiere revivir, etc.

Es por ello que, por ejemplo, si veinte estudiantes realizan el diseño de un edificio, digamos de la vivienda de una misma persona, se obtienen veinte soluciones diferentes, todas las cuales pueden ser válidas.

El arquitecto da respuesta a las necesidades físicas y psicológicas de las personas que utilizarán las obras arquitectónicas.

Para dar una respuesta adecuada a las necesidades corporales y espirituales de los usuarios, la arquitectura tiene que ver tanto con la razón como con el sentimiento.

Dentro de las necesidades físicas están las de poder moverse adecuadamente en los espacios, contar con una buena cantidad de aire puro para respirar, buena iluminación, privacidad, etc.

Dentro de las necesidades espirituales o psicológicas, está la necesidad estética porque no se trata solamente de crear espacios en donde los usuarios puedan desarrollar adecuadamente sus actividades, sino que estos espacios les transmitan sensaciones armónicas y agradables; espacios con buenas vistas que proporcionen tranquilidad, alegría, etc.

Conociendo a los futuros usuarios y sus necesidades, preparamos un programa de necesidades, es decir, una lista de todos los espacios que requerirá la obra, indicando los requisitos de cada uno de ellos en cuanto a su forma, tamaño, iluminación, ventilación, vistas, mobiliario, equipo, etc.

Luego estudiamos detenidamente las relaciones entre dichos espacios.

Conociendo cuáles son los espacios necesarios y sus relaciones decidimos en qué lugar del terreno se ubicará el edificio; qué espacios quedarán al norte y cuáles al sur, al este o al oeste, cuáles cerca del acceso, cuáles retirados, etc. Es decir, haremos una zonificación.

Una vez que tenemos planteada, de manera general, la ubicación de cada espacio en el terreno, procedemos a realizar los primeros esquemas tridimensionales, empezando a darle forma a los espacios, teniendo en cuenta su función y planteando la manera de estructurarlos.

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Estos esquemas se van desarrollando y mejorando paulatinamente hasta llegar a una propuesta concreta que se muestra a la persona que nos ha encargado el diseño. A dicha propuesta se le conoce con el nombre de anteproyecto.

Al diseñar un objeto arquitectónico, seguimos una serie de pasos sucesivos que se inician con el conocimiento de las necesidades y terminan con la propuesta arquitectónica. Pero no se trata de un proceso lineal ni rígido sino de un proceso dialéctico, porque constantemente vamos tomando ideas de la realidad y proponiendo nuevas alternativas, que se reajustan con mayor precisión según las confrontamos con las necesidades concretas a resolver.

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Generalmente, al realizar un diseño arquitectónico, seguimos un proceso que consta de varios pasos. Es importante que los estudiantes de arquitectura desarrollen cada uno de dichos pasos porque esto les permite adquirir un orden en el proceso mental de producir un diseño arquitectónico.

Es necesario recalcar que el proceso de diseño no es lineal ni rígido sino flexible. Las ideas, pensamientos y procesos mentales de los seres humanos se expresan de forma integral y no separando los diferentes aspectos. En un mismo momento pensamos en mil aspectos diferentes y sería absurdo establecer un proceso de diseño rígido y lineal; pero siempre necesitamos una guía que ayude a ordenarnos. Es necesario tener en cuenta un orden, ir encauzando nuestro proceso mental, seguir algunos pasos al diseñar.

Los arquitectos experimentados muchas veces no desarrollan explícitamente todos los pasos, ya que ellos tienen tanta práctica que pueden establecer las diferentes relaciones de manera mental. Por ejemplo, a veces no necesitan dibujar organigramas o matrices porque lo hacen mentalmente.

Pasos para realizar el proceso de diseño arquitectónico

Es importante planificar nuestro trabajo, considerar los tiempos, establecer un cronograma, hacer una ruta crítica que nos ayude a organizar el trabajo, para no atrasarnos y poder cumplir con nuestros compromisos. Por lo general, los pasos que seguimos al realizar un diseño arquitectónico son los siguientes:

  • Conocimiento general del lugar en donde se construirá la obra (territorio, municipio, ciudad, poblado).
  • Conocimiento de los futuros usuarios de la obra arquitectónica y las actividades que realizarán.
  • Estudio del sitio en donde se construirá la obra (aspectos naturales, sociales y artificiales)
  • Conocimiento de modelos análogos.
  • Programa de necesidades.
  • Estudio de las relaciones entre los espacios (organigramas, flujogramas y matrices).
  • Ideas rectoras.
  • Zonificación.
  • Esquemas tridimensionales.
  • Anteproyecto.
  • Proyecto.
  • Supervisión de la obra.
  • Evaluación.

Etapas del diseño arquitectónico

El diseño arquitectónico es un proceso complejo que se desarrolla a través de varias etapas, cada una con sus particularidades y requisitos. Este proceso sistemático es fundamental para transformar una idea inicial en una estructura física que responda a los requisitos funcionales, estéticos y contextuales del entorno y los usuarios. A continuación se presenta una introducción a las etapas del diseño arquitectónico.

Desde la concepción hasta la realización, el diseño arquitectónico abarca un espectro de actividades creativas y analíticas. Es un trayecto que lleva al arquitecto desde la abstracción inicial hasta el detalle más concreto de la construcción. Las etapas de este proceso son fundamentales para garantizar que el proyecto no solo sea viable sino también que cumpla con las expectativas y necesidades de quienes lo habitarán y utilizarán.

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1. Definición del Programa y Pre-diseño

La fase de Definición del Programa y Pre-diseño es un paso crítico en el proceso de diseño arquitectónico, que establece las bases para el éxito del proyecto. Esta etapa se enfoca en la comprensión profunda y detallada de las expectativas y necesidades del cliente, así como en el análisis exhaustivo del sitio donde se emplazará el proyecto. Es esencial para asegurar que el diseño final no solo sea estéticamente agradable y funcional sino también viable desde el punto de vista técnico, legal y financiero.

Durante esta fase inicial, se llevan a cabo reuniones con el cliente para discutir y precisar sus requerimientos, aspiraciones y el presupuesto disponible para el proyecto. Es fundamental establecer una comunicación clara y efectiva desde el principio para garantizar que los objetivos del cliente se alineen con las posibilidades reales de ejecución.

La investigación del sitio constituye otro componente crucial de esta etapa. Se realiza un análisis detallado del entorno, considerando aspectos como el clima, la topografía, las vistas, la orientación, y los factores ambientales que puedan influir en el diseño. Además, se revisan las normativas y restricciones locales, incluyendo zonificaciones, códigos de edificación y posibles servidumbres o restricciones de uso, que puedan afectar el desarrollo del proyecto.

Este análisis preliminar del sitio y el entendimiento de las necesidades del cliente permiten definir los objetivos específicos del proyecto, identificar los requisitos funcionales de los espacios a diseñar y establecer las restricciones y parámetros dentro de los cuales debe desarrollarse el diseño. También se consideran las estrategias de sostenibilidad y eficiencia energética desde el inicio, asegurando que el proyecto contribuya positivamente al entorno y minimice su impacto ambiental.

2. Esquema o Concepto de Diseño

En la etapa de esquema o concepto de diseño, el arquitecto se dedica a la generación y exploración de las primeras ideas, utilizando bocetos preliminares y modelos conceptuales. Este proceso es fundamental para traducir las necesidades y aspiraciones del cliente en soluciones espaciales y formales viables. Durante esta fase, se establece la dirección general del proyecto, definiendo las principales estrategias de diseño que guiarán su desarrollo futuro.

El arquitecto emplea una variedad de herramientas y métodos, desde el dibujo a mano hasta software de modelado 3D, para experimentar con diferentes configuraciones espaciales, relaciones entre los espacios, y la interacción del edificio con su contexto y el medio ambiente. La creatividad y la innovación son esenciales en este punto, permitiendo al profesional explorar múltiples posibilidades sin restricciones significativas, buscando siempre una respuesta óptima que satisfaga tanto las demandas funcionales como las estéticas del proyecto.

Además, en esta etapa, se consideran los principios de sostenibilidad, la orientación del edificio, y la integración de elementos naturales y artificiales, buscando crear espacios que no solo sean eficientes y funcionales sino también inspiradores y armoniosos. La comunicación continua con el cliente es clave para asegurar que el concepto de diseño refleje fielmente sus expectativas y se ajuste a su visión y requisitos.

La fase de esquema o concepto de diseño culmina con la selección de una o varias propuestas que serán desarrolladas y refinadas en las siguientes etapas del proceso de diseño. Este momento crítico en el proyecto arquitectónico sienta las bases para todas las decisiones de diseño subsiguientes, asegurando que el proyecto final no solo cumpla con los criterios técnicos y funcionales sino que también exprese la identidad y los valores del cliente y de la comunidad a la que servirá.

3. Desarrollo del Diseño

En la etapa de desarrollo del diseño, el arquitecto profundiza en la materialización del concepto seleccionado, transformándolo en un plan arquitectónico viable y detallado. Durante este proceso, se define con precisión la geometría del proyecto, ajustando las dimensiones, formas y la interrelación espacial de los diversos componentes. Esta fase es crucial, ya que establece las bases firmes sobre las cuales se construirá el proyecto.

La selección de materiales comienza a tomar forma en esta etapa, siendo una decisión que impacta directamente en la estética, la sostenibilidad y la funcionalidad del diseño. El arquitecto evalúa opciones basándose no solo en criterios estéticos, sino también en consideraciones de durabilidad, mantenimiento y compatibilidad ambiental. Este proceso de selección es iterativo y a menudo involucra la consulta con otros especialistas para asegurar la mejor elección para cada aplicación específica.

Asimismo, se da especial atención a los aspectos estructurales, buscando soluciones que no solo cumplan con los requisitos de seguridad y estabilidad, sino que también se integren armoniosamente con el concepto general del diseño. La iluminación y la ventilación se consideran desde una perspectiva tanto funcional como estética, procurando crear ambientes que promuevan el bienestar y la comodidad de los usuarios finales.

Los sistemas técnicos, incluyendo la plomería, la electricidad y la climatización, se planifican meticulosamente para asegurar su eficiencia y correcta integración dentro del espacio arquitectónico. Esta planificación detallada asegura que el edificio no solo sea funcional y seguro, sino también energéticamente eficiente y sostenible a largo plazo.

A medida que el diseño se desarrolla, los dibujos arquitectónicos evolucionan de esquemas preliminares a representaciones técnicas detalladas, incluyendo planos de planta, elevaciones y secciones. Estos dibujos detallados son fundamentales para comunicar la intención del diseño a los constructores, ingenieros y demás partes interesadas, sirviendo como el lenguaje universal a través del cual se materializa la visión del arquitecto.

4. Documentación del Proyecto

En la etapa de documentación del proyecto, considerada esencial dentro del proceso de diseño arquitectónico, el arquitecto se enfoca en la elaboración meticulosa de los dibujos técnicos y las especificaciones que serán necesarios para la ejecución de la obra. Esta fase es fundamental, ya que transforma las ideas conceptuales y los diseños desarrollados en instrucciones claras y detalladas para los equipos de construcción.

Durante este periodo, se preparan planos detallados que incluyen plantas, elevaciones, secciones y detalles constructivos, especificando las dimensiones exactas, la distribución espacial, y la relación entre los distintos elementos del edificio. Los materiales, acabados y técnicas constructivas se seleccionan y describen con precisión, asegurando que todos los aspectos del diseño arquitectónico se comuniquen de manera efectiva a los constructores y artesanos.

La precisión en la documentación del proyecto es crítica para evitar posibles problemas durante la fase de construcción. Un conjunto de documentos bien elaborado y detallado minimiza los riesgos de malentendidos, errores en la construcción y posibles desviaciones del presupuesto inicial. Además, estos documentos cumplen con un rol crucial en el proceso de licitación, permitiendo a los contratistas comprender completamente el alcance del proyecto y presentar ofertas más precisas y realistas.

El arquitecto, en esta etapa, trabaja estrechamente con otros profesionales, como ingenieros estructurales, mecánicos y eléctricos, para integrar todos los sistemas del edificio de manera coherente y asegurar que el proyecto cumpla con los códigos de construcción locales, las normativas de seguridad y los estándares de sostenibilidad. La colaboración multidisciplinaria es esencial para abordar complejidades técnicas y asegurar la viabilidad del proyecto.

Finalmente, la fase de documentación del proyecto no solo facilita una construcción fluida y conforme a lo planeado, sino que también sirve como registro legal y técnico del diseño arquitectónico, proporcionando una base para futuras referencias, mantenimiento y modificaciones del edificio. Por lo tanto, esta etapa demuestra la importancia de la meticulosidad y la precisión en la práctica arquitectónica y de ingeniería civil, subrayando el compromiso con la calidad y la excelencia en la realización de proyectos construidos.

5. Administración de la Construcción

En la etapa de administración de la construcción, la supervisión del proceso constructivo se convierte en una tarea fundamental para garantizar que el proyecto se desarrolle conforme a lo estipulado en los documentos de construcción, respetando el presupuesto y los plazos previstos. Aunque esta responsabilidad no recae exclusivamente en el arquitecto, su participación es crucial para el éxito del proyecto. Como mediador entre el cliente y los contratistas, el arquitecto asume un rol clave en la solución de problemas técnicos que surgen durante la construcción.

Desde la perspectiva de un arquitecto, esta fase implica una constante coordinación y comunicación con todos los involucrados en el proyecto. El profesional debe asegurarse de que las especificaciones técnicas, los materiales seleccionados y las técnicas constructivas se apliquen correctamente en obra. Además, es su responsabilidad realizar visitas periódicas al sitio de construcción para inspeccionar el avance y la calidad del trabajo, así como para verificar el cumplimiento de los estándares de seguridad y ambientales.

La habilidad del arquitecto para anticiparse a los problemas, proponer soluciones efectivas y adaptarse a los cambios, es esencial en esta etapa. Además, debe ser capaz de gestionar las expectativas del cliente, manteniendo una comunicación fluida y transparente sobre el progreso del proyecto. La administración de la construcción, por lo tanto, no solo implica un seguimiento técnico, sino también una gestión eficaz de las relaciones humanas y contractuales.

6. Post-construcción y Evaluación

En la etapa de post-construcción y evaluación, el arquitecto o ingeniero civil lleva a cabo una revisión meticulosa del proyecto completado, con el objetivo de asegurar que se hayan cumplido todas las expectativas del cliente y las necesidades de los usuarios finales. Este proceso implica una inspección detallada de la obra construida, identificando si hay necesidad de realizar ajustes finales o correcciones para optimizar el funcionamiento y la habitabilidad del espacio.

Durante esta fase, el profesional evalúa la calidad de los materiales utilizados, la precisión en la ejecución de los detalles constructivos y la eficacia de las soluciones de diseño implementadas. Es un momento crítico para verificar la integración y el desempeño de los sistemas estructurales, mecánicos, eléctricos y de plomería, así como para confirmar que el edificio cumple con los estándares de sostenibilidad y eficiencia energética establecidos en el diseño original.

La evaluación post-construcción también sirve como una oportunidad valiosa para el arquitecto o ingeniero civil de reflexionar sobre el éxito global del proyecto. Se analizan aspectos como la respuesta del edificio a su contexto, la funcionalidad de los espacios creados y la satisfacción de los ocupantes. Este análisis retrospectivo permite al profesional identificar áreas de mejora, fortalezas y debilidades en su práctica, contribuyendo a su desarrollo profesional continuo.

Además, el feedback de los clientes y usuarios finales es fundamental en esta etapa. Sus experiencias y percepciones proporcionan insights cruciales sobre la efectividad del diseño en términos prácticos y estéticos. Este intercambio de información no solo ayuda a finalizar el proyecto actual de manera más satisfactoria, sino que también informa y enriquece proyectos futuros.

Finalmente, la etapa de post-construcción y evaluación subraya la importancia de la responsabilidad y el compromiso a largo plazo del arquitecto o ingeniero civil con su obra. A través de este proceso, se asegura que el proyecto no solo sea un logro técnico y estético en el momento de su finalización, sino que también continúe funcionando y respondiendo adecuadamente a lo largo del tiempo, adaptándose a las necesidades cambiantes de sus usuarios.

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Qué considerar en el diseño arquitectónico

Para satisfacer las necesidades de los clientes y ser funcional, el diseño arquitectónico debe tener en cuenta varios aspectos, tanto legales como de seguridad, así como también ambientales. Antes de comenzar el proyecto, el arquitecto debe hablar sobre los deseos e intereses de la familia o de la empresa que lo contrató.El diseño arquitectónico se centra en la estética y función de la estructura. Su diseño trabaja para crear un espacio que fluye con su entorno.

Es en esta etapa que el profesional de Arquitectura y Urbanismo comienza a idealizar el diseño arquitectónico. Debe comprender el estilo de vida de las personas que aprovecharán el espacio, lo que estas personas necesitan, los problemas estructurales o de movilidad que enfrentan, entre muchos otros problemas.

A continuación, debe saber exactamente qué tamaño de terreno puede ocupar el edificio. Para ello, el arquitecto consulta la Ley de Uso y Ocupación del Terreno, definiendo el espacio máximo disponible para la ejecución del proyecto arquitectónico. Luego hará un levantamiento topográfico, investigando las elevaciones y depresiones en el terreno, así como las diferencias de nivel.

Otros temas importantes son la vegetación presente en el sitio, que puede eliminarse totalmente o no, la incidencia del sol y el tipo de suelo. Es a partir de esta encuesta de datos, junto con el conocimiento del perfil del usuario, que el arquitecto elabora la primera propuesta para el cliente.

Teoría del diseño arquitectónico 

El diseño arquitectónico proporciona los medios para interpretar los valores, las metas y los conceptos de la sociedad en una forma construida.

Una estructura adquiere significado a través de la forma en que su forma se relaciona con el entorno contextual y también cómo se relaciona con la persona humana que lo habita.

El diseño arquitectónico es en su base, ideológico en la forma en que puede promover y mejorar las posiciones sociales y los ideales. El diseño de nuestro entorno, con la excepción de algunas tendencias actuales, ha sido esencial en gran medida para definir nuestra cultura y subculturas, al tiempo que proporciona una reproducción a largo plazo de los ideales culturales en forma desarrollada.

Los edificios pueden "leerse" en relación con una cultura específica. El diseño arquitectónico es un proceso en el cual las necesidades de la sociedad se erigen en una forma construida que posteriormente define los objetivos de la sociedad misma.

La sociedad proporciona la base cultural para el diseño y la interpretación. La cultura dentro de una sociedad dada a menudo no es simplemente un elemento categorizado, sino que se entrelaza en diferentes niveles a través de muchas instancias sociales. La práctica del diseño arquitectónico capta las influencias culturales y sociales relacionadas con el problema de diseño específico y, por lo tanto, traduce estas influencias en una estructura que encarna la cultura.

La posición sociológica del diseño arquitectónico trata no solo con la sociedad en su conjunto sino también con la sociedad a nivel individual. El diseño relativo a la persona debe satisfacer sus necesidades básicas y responder con un lenguaje que pueda aceptar como la definición de su lugar dentro de la sociedad. Esta idea de lugar conlleva significado en dos niveles; colocar como una entidad construida, y colocar como un componente del orden social. Es a nivel del individuo que las personas buscarán vivienda para satisfacer sus necesidades (orden local y social) y elegirán trabajar en lugares que reflejen sus ideales de posición social.

Los individuos tienen una gran influencia en el diseño arquitectónico en la manera en que interactúan, se comportan, ocupan y controlan el espacio, o lo ignoran. La seguridad está relacionada con los sentimientos personales que pueden verse afectados por el espacio en el que vive el individuo. La sensación de seguridad, o la percepción de peligro, se verá afectada por el entorno construido y, por lo tanto, afectará al individuo en ese lugar. Estos sentimientos tienen una gran influencia en cómo se ve una solución de diseño arquitectónico en relación con la sociedad que lo rodea.

El diseño arquitectónico incorpora tanto la tecnología disponible para la construcción como las conocidas iniciativas sociales en una forma construida. No es suficiente ver el Partenón en Roma como una estructura, ya que para algunos puede parecer simplemente un edificio antiguo. Un edificio como el Partenón debe verse en relación con el contexto en el que se construyó. Debe ser plenamente apreciado con respecto a la sociedad que lo construyó, la lógica de diseño que lo concibió, y también con respecto a los ciudadanos de la cultura específica que lo habitaron.

Las verdaderas obras de arquitectura no se comprenden completamente sin la inclusión del conocimiento de la cultura que rodea estos diseños. La influencia cultural es el sentido "personal" del tiempo y el lugar que contribuyen al lugar del edificio. Es una nota interesante que los edificios son propiedades designadas como "patrimonio" dentro de nuestra sociedad cultural. La designación del patrimonio se refiere a los elementos de diseño de la estructura, así como a la ubicación temporal histórica de su construcción. Muy a menudo, los sitios históricos ya no cumplen su función original dentro de nuestra sociedad actual.

Una iniciativa contenida en este documento es para promover una mayor comprensión de nuestros roles y normas de comportamiento social (América del Norte). La comprensión del concepto de espacio personal es importante dentro del diseño arquitectónico con el fin de crear un entorno que pueda respetar tanto al individuo como a los grupos. Esta iniciativa se explora dentro del concepto de espacio para promover la conciencia de la naturaleza y el contexto de nosotros mismos y de quienes nos rodean. Si bien podemos tomar el comportamiento de la sociedad como un hecho a través de nuestra vida cotidiana, el diseño arquitectónico debe ser capaz de crear entornos respetuosos de los aspectos de comportamiento que damos por sentado.

Los principios de diseño arquitectónico deben considerar elementos de tendencias de comportamiento conocidas en la resolución del diseño.

Las necesidades humanas básicas (físicas y emocionales) incluyen:

  • Sustento (comida y bebida);
  • Seguridad (seguridad personal);
  • Afecto
  • Autorrealización.

Las dos primeras necesidades se relacionan con el sentido físico de nuestra existencia. Es completamente posible existir como individuo sin interacción con otros mientras se satisfacen estas dos primeras necesidades. Las últimas dos necesidades se relacionan con nuestras condiciones emocionales como humanos.

Estas necesidades se pueden categorizar en componentes separados a excepción del sustento (una necesidad humana básica).

El desglose de las necesidades se clasifica como:

  1. Formación de autoestima / amistad
  2. Participación grupal
  3. Espacio personal
  4. Estado personal
  5. Territorio individual y grupal
  6. Comunicación
  7. Seguridad y protección

El papel del diseño arquitectónico

La función social del diseño arquitectónico sigue siendo polifacética y compleja. Un arquitecto debe ser entrenado en composición estilística y teoría, estudio a través de antropología y periodismo, así como filosofía e historia, empapado en los matices culturales de la cultura y subculturas sociales locales, y conocedor de soluciones técnicas. Deben ser capaces de sintetizar este cuerpo de conocimiento de una manera que aborde con éxito las necesidades, los deseos, los requisitos y los recursos del cliente.

"La arquitectura refleja el expectante cultural que la produce". R. JOHNSTONE, (CONFERENCIANTE DE SAA, 2005)

La teoría de la arquitectura es crucial para la forma en que se completa el diseño arquitectónico. La teoría en la profesión ha cambiado drásticamente en el siglo XX a medida que los medios y métodos de diseño y construcción han ido creciendo. Una lista abreviada de las diversas formas de diseño arquitectónico contemporáneo incluye:

  • Productivismo (basado en la tecnología)
  • Racionalismo (composición formal)
  • Estructuralismo (antropológico)
  • Populismo (contextual)
  • Regionalismo (basado en localidad)
  • Deconstructivismo (abstracto)
  • Posmodernismo (similar al populismo)
  • Modernismo (similar al Productivismo)

El diseño arquitectónico, para tener éxito, debe encontrar el equilibrio entre realidad, teoría y practicidad. La realidad se relaciona con el componente del diseño en tiempo real, colocándolo dentro de una estructura social / cultural dada que proporciona los elementos conocidos de significado para la solución. La teoría es el modo de diseño que aplica los constructos de diseño arquitectónico a la realidad propuesta. La practicidad se relaciona con la naturaleza específica de las necesidades del cliente (el programa de construcción y el presupuesto), así como las capacidades tecnológicas disponibles. Es técnicamente posible construir un rascacielos en los campos de hielo del Ártico, pero es económicamente inviable y teóricamente improbable.

Para mantener adecuadamente la relevancia del diseño arquitectónico dentro de la sociedad, siempre debe haber una preocupación sociológica aplicada a cada solución de diseño. Un edificio logra significado a través de su forma construida y espacio intangible, en la forma en que estos elementos se relacionan con la persona humana que lo usa y lo habita. Los edificios que se elevan al estado de "arquitectura" son aquellos que pueden relacionar sus significados intrínsecos (físicos y espirituales) con aquellos que lo habitan y lo visualizan, proporcionando así un mayor nivel de apreciación.

Capacidad y expresión

La capacidad de dar forma a nuestro entorno construido y la vida de las personas es una poderosa expresión de lo que significa ser humano. La expresión de la naturaleza humana se puede encontrar a través de muchos formatos artísticos, alimentados por el impulso emocional y las intenciones del artista. Los trabajos artísticos relativos a la condición humana surgen de la percepción e interpretación del artista de la "verdad" relativa a la condición humana. La arquitectura, como se ve en los campos de arte adyacentes, también busca la "verdad" en el diseño a través del proceso representacional del diseño.

Percepción y verdad

La percepción pública y la aceptación de las habilidades creativas personales únicas proporcionadas por los arquitectos han estado en su lugar desde los primeros días del diseño. Aunque el público puede no estar siempre de acuerdo o las percepciones pueden estar sesgadas, la posición especial relativa al diseño de edificios ha existido. Es principalmente a través de una falta de comprensión que el papel específico de un arquitecto ha sido mal entendido.

El diseño arquitectónico como una forma de arte se basa en la comprensión del arquitecto de la "verdad" en el diseño. Verdad significa muchas cosas en la construcción según el subtrabajo con el que puede estar conversando, y es probable que haya tantas interpretaciones de "verdad" como comerciantes en el sitio en cualquier momento.

En el caso del diseño arquitectónico, "verdad" tiene una definición muy limitada, reestructurada a los términos "verdad absoluta". La verdad absoluta habla de la honestidad y la claridad con que la solución de diseño resuelve el problema presentado por el propósito del cliente al contratar al arquitecto. La verdad absoluta habla de la habilidad y la honestidad de la capacidad del arquitecto para identificar clara y sucintamente el problema presentado por el cliente y resolverlo en una forma integrada.

La arquitectura como forma de arte proporciona más que los edificios vernáculos, ya que la arquitectura proporciona a la estructura una calidad que no puede definirse claramente, excepto llamarla "verdad" en el diseño. Esta cualidad de verdad está fuera del ámbito del realismo, los límites, la clase social o la raza; como la verdad es sin fronteras, fronteras y delineaciones sociales. La verdad absoluta en el diseño de edificios es universal dentro de la cultura que lo creó.

Un diseño arquitectónico puede enfrentarse a restricciones realistas (colocación de elementos específicos); sin embargo, estas restricciones no tendrán ninguna incidencia en si el edificio logra el nivel de verdad en su diseño o no. La capacidad de lograr la verdad radica en la habilidad y la personalidad del arquitecto de diseño.

El diseño como una forma de arte se basa en la habilidad del arquitecto para incluir, ya sea gráfica o inherentemente, la intención artística de la solución. Esta inclusión es parte de la base filosófica de la solución de diseño final.

La buena arquitectura es un espacio que siempre es interesante, proporciona descubrimiento, inspiración y siempre toca los sentidos. No se vuelve ordinario. Es como dar un paseo por un bosque, los árboles están todos allí, pero el bosque se revela de manera diferente cada vez. Comience a notar los detalles, y prometo que esta distinción de arquitectura puede mejorar la calidad de su vida. La arquitectura está hecha por el hombre, y tú tienes el control sobre ella. Puede crear un entorno que respalde su ser y puede elegir estar en un entorno que mejore su día a día. Está disponible. C. Michael kitner, arquitecto

El diseño también utiliza el arte como medio de comunicación entre el arquitecto y el cliente. Es esta comunicación o diálogo de arquitecto / cliente lo que crea el entendimiento entre todas las partes sobre la función y la filosofía del edificio. El arquitecto debe ser experto en la práctica de comprender las necesidades y los deseos del cliente (intención) para interpretar los elementos en la solución de construcción artística.

Este diálogo se basa en la comprensión de la comunicación entre las partes. El principal medio de comunicación con la arquitectura es visual: una muestra de la solución prevista para la comprensión y la aceptación por parte del cliente. La capacidad de visualizar, dibujar e ilustrar la solución de las necesidades verbales comienza con la capacidad del arquitecto para interpretar visualmente los requisitos iniciales del cliente. Este proceso de interpretación inicial casi siempre se completa a través del proceso de bosquejar.

Función

Cada diseño se completa con el fin de servir a un aspecto funcional definido de nuestra existencia. El éxito de una solución de diseño es evidente cuando resuelve el problema proporcionando un entorno adecuado. La falla de la función es evidente cuando el diseño no logra este objetivo.

La función se relaciona con la esencia de la solución de diseño. La función también tiene que respetar el ritmo de vida relacionado con aquellos que ocupan los espacios.

La arquitectura debe ser considerada por nosotros con el pensamiento más serio. Podemos vivir sin ella y adorar sin ella, pero no podemos recordar sin ella. Hay dos deberes que respetan la arquitectura nacional cuya importancia es imposible sobrevalorar; el primero, para hacer que la arquitectura del día sea histórica; y, el segundo, para preservar, como la más preciosa de las herencias, la de las edades pasadas. John ruskin, las siete lámparas de arquitectura

Una casa está destinada a proporcionar refugio de los elementos y la seguridad o protección de los demás. Estos dos aspectos son la función básica de una casa. Una casa también debe proporcionar un lugar para las funciones de reunión, juego, trabajo, retiro, exposición, adoración, celebración, consuelo, etcétera. Todas las funciones de la vida diaria deben acomodarse en la esencia de una residencia para que sirva plenamente a su propósito. Se pueden describir los mismos problemas para nuestros entornos educativos, institucionales, corporativos y públicos. Es una tarea difícil considerar todos estos aspectos relativos al diseño arquitectónico; un orden que la práctica arquitectónica intenta satisfacer constantemente.

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Tiempo 

La dimensión del tiempo es la cuarta dimensión cognitiva aplicable al diseño arquitectónico. El tiempo juega un papel crucial en la forma en que se experimenta, se aprecia y se comprende la arquitectura.

Para experimentar adecuadamente el diseño arquitectónico, que de hecho es un objeto inanimado, un participante debe ser capaz de pasar tiempo dentro y alrededor del edificio para proporcionar:

  • Es hora de caminar y experimentar el tamaño relativo a su pasaje.
  • Tiempo para fluir dentro de la estructura para experimentar la interacción del espacio resultante de tus movimientos.
  • Es hora de observar y experimentar cómo el diseño es más adecuado para la función prevista.
  • En ese orden hay que observar las formas, los sólidos y los vacíos, así como los efectos de textura y los colores dentro de los espacios.
  • Es hora de observar las condiciones de iluminación, cómo cambian durante los días y las estaciones, cómo los efectos dentro de la estructura son alterados por la iluminación.
  • Tiempo para experimentar la acústica dentro de los espacios; ecos, quietud, reverberación, sonidos apagados.
  • Es hora de experimentar el diseño con todos nuestros sentidos, estableciendo nuestra presencia y sensación de estar dentro del diseño.
  • Tiempo para que el edificio exista a través de los años de la humanidad, estableciéndose como una obra adecuada para el manto conocido como arquitectura. Esta afirmación no significa que algo antiguo se clasifique como arquitectura, ya que el mal diseño no necesariamente mejora con la edad (ni el vino malo).

El diseño arquitectónico proporciona un cuadro histórico a través del paso del tiempo que documenta nuestras vidas y refleja nuestra existencia para las generaciones futuras.

El paso del tiempo crea un vínculo distintivo entre la arquitectura y el usuario. Recordamos lugares, edificios y experiencias basados ​​en el espacio y el tiempo en que ocurrió. Nuestras infancias están formadas por recuerdos, muchos de los cuales se centran en la arquitectura que experimentamos o habitamos en un momento determinado. La arquitectura como un elemento de recinto crea la oportunidad para las experiencias; el tiempo a medida que pasa crea la memoria de la arquitectura en relación con nuestra experiencia.

Aquellos de uso que se preocupan por los edificios tienden a olvidar demasiado fácilmente que toda la vida y el alma de un lugar, todas nuestras experiencias allí, dependen no solo del entorno físico, sino de los patrones de eventos que experimentamos allí. Christopher alexander, la forma intemporal de construir

La conexión más íntima entre la estructura y la humanidad se puede encontrar en nuestra percepción del hogar. Con el paso del tiempo, nos vinculamos con nuestro entorno personal; crearlo y cambiarlo para adaptarlo a nuestras necesidades en el momento, pero siempre confiando en él para cumplir con su propósito básico (refugio y protección) mientras nos brinda la oportunidad de usarlo para nuestros propios fines. Al final de nuestro tiempo en el hogar, a menudo personificamos la casa como "familia", yendo más allá de la realidad de que la casa, aunque tal vez modificada y envejecida, sigue siendo la misma entidad que en el momento de la construcción. La casa sigue siendo una compilación de materiales de construcción dispuestos de tal manera que encierran el espacio. Esta compilación (la casa) se ha convertido a través del tiempo en una parte de nuestra realidad y existencia.

Compromiso individual con un esfuerzo grupal: eso es lo que hace que un equipo trabaje, una empresa funcione, una sociedad trabaje, una civilización funcione. Vince lombardi

Iluminación en diseño arquitectónico

El aspecto de la iluminación en relación con el diseño arquitectónico es crucial para garantizar el éxito. La atmósfera y la estética del espacio y la forma pueden ser borradas por una iluminación inadecuada o inadecuada.

Esta parte del proceso de diseño involucra la disciplina de la ingeniería eléctrica para proporcionar datos y antecedentes, participando en la selección y el diseño del accesorio para proporcionar iluminación adecuada para mejorar la experiencia del usuario. Este proceso se relaciona con la integración de iluminación artificial. El proceso de iluminación diurna es más difícil de controlar.

Esas divisiones (divisiones del diseño mismo) son, necesariamente, ya sea en masas de luz y sombra. Se puede decir que el poder de la arquitectura depende de la cantidad (ya sea medida en el espacio o la intensidad) de su sombra. John ruskin, las siete lámparas de arquitectura

La iluminación diurna en el diseño arquitectónico es difícil de controlar adecuadamente, pero es esencial para nuestro propio bienestar y, posteriormente, para la experiencia del diseño en sí. La luz del día cambia constantemente ya que el camino solar nunca es repetitivo, ni tampoco el clima en un día o época determinados del año. El diseño debe ubicar estratégicamente los vacíos necesarios (ventanas, tragaluces, ventanas del triforio, puertas) para capturar y dirigir la luz del día para proporcionar el efecto deseado. Estos efectos, cuando se logran adecuadamente, pueden agregar un sentido de ambiente teatral al espacio.

Influencias acústicas en el diseño arquitectónico

Las influencias acústicas relativas al diseño arquitectónico son un concepto importante. Ignorar las propiedades acústicas del espacio, la forma y la textura correrá el riesgo de crear entornos que no cumplan con su función prevista. Proporcionar para esta consideración mejorará el ambiente y la experiencia de una solución de diseño.

La acústica responde a nuestro sentido de escala dentro de un espacio, incluso con las luces apagadas. La naturaleza humana a través de la experiencia es capaz de decir el tamaño relativo de un espacio únicamente por el sonido de los pasos en la superficie del piso.

La generación de sonido se ve mejorada o limitada por el tamaño del espacio, las formas, las texturas y superficies y el tipo de materiales utilizados en todo. Esta consideración ha creado una nueva disciplina de ingenieros acústicos o ambientales que estudian las propiedades específicas del sonido.

Esta disciplina de ingeniería acústica proporciona información para el proceso de diseño para ayudar a la resolución del ambiente acústico previsto. Las áreas de desempeño y práctica requieren tratamientos por separado de las áreas de conferencias y oficinas; las aulas necesitan una atenuación de sonido adecuada para la palabra hablada, mientras que los auditorios y gimnasios pueden requerir la adición de sistemas específicos de sonido direccional. Cada una de estas instancias tendrá un impacto en la solución de diseño y debe estudiarse cuidadosamente durante el proceso de diseño arquitectónico.

La influencia del sonido y el espacio se puede encontrar en la inflexión de las ceremonias religiosas. Los diseños originales de la catedral, como se menciona en la sección de historia, se basaron en los planos de la basílica romana; un gran espacio central con pasillos estrechos paralelos. Se exigió a los celebrantes que arrojaran sus voces para llevar el sonido por todo el espacio interior. Sin embargo, este sonido fuerte creó un eco rítmico, causando una reverberación del sonido de la pared, el piso y las superficies del techo. La audibilidad de una oración monótona, no rítmica se perdió debido a superposiciones en el sonido proveniente del celebrante y ecos repetitivos. Parecería que muchas personas decían lo mismo en diferentes momentos, todas combinadas en un patrón de sonido caótico.

Para superar esta deficiencia audible, se estableció la modulación de las oraciones y los cánticos, enfatizando los componentes cruciales del texto y la celebración, minimizando o haciendo uso del eco potencial. Estas entonaciones rítmicas todavía están en uso hoy en día, respetadas como la manera en que se llevan a cabo las celebraciones. Este aspecto actual de los servicios religiosos es un resultado directo del intento de superar las deficiencias acústicas del diseño de la iglesia primitiva.

La tecnología moderna ahora proporciona los medios y métodos para probar los espacios, antes de la construcción, para garantizar que se logre la acústica adecuada. Se sabe que las superficies duras reflejarán el sonido y las superficies suaves absorberán el sonido. El tipo de material utilizado, la textura e incluso la forma del formulario se utilizarán para dirigir, controlar, aumentar o absorber sonidos en función del uso previsto del espacio.

"hay dos maneras de ser creativo: uno puede cantar y bailar, o uno puede crear un entorno en el que florezcan cantantes y bailarines".warren bennis

Arquitectura y medio ambiente en el diseño arquitectónico

El diseño arquitectónico toma una decisión consciente al crear una estructura dentro del mundo natural. Las opciones disponibles son para armonizar con el entorno (natural o construido) o para diferenciarse de ellos.

Armonizar con el medio ambiente es mezclarse, simpatizar con la naturaleza del paisajismo o las estructuras adyacentes, convirtiéndose en un componente coherente dentro del área contextual.

Pararse aparte crea una declaración distinta relativa a la solución de diseño. Esta declaración incluye el aislamiento de la solución de diseño dentro del entorno construido, diferenciándolo como un punto focal dentro del área mayor. Crear de esta manera dentro de un entorno natural constituye la declaración del impacto de la humanidad en el mundo; el dominio, la manipulación y el enfoque son la percepción resultante.

El valor de la arquitectura depende de dos caracteres distintos: el uno, la impresión que recibe del poder humano, el otro, la imagen que posee de la creación natural. John ruskin, las siete lámparas de arquitectura

El ambiente en sí mismo puede ser urbano o rural, dependiendo de la comisión específica. Si los arquitectos eligen seguir cualquiera de los dos caminos, deben permanecer conscientes de las condiciones ambientales. Nunca, en cualquier situación, se debe ignorar la consideración del medio ambiente.

Las consideraciones ambientales naturales se tratan en mayor detalle dentro de la sección geografía de este plan de estudios. Brevemente descrito, las consideraciones ambientales deberían incluir:

  • Topografía natural (formaciones y tipos de tierras)
  • Paisajismo natural
  • Temas de construcción circundantes o adyacentes que existen
  • Uso / área del suelo (industrial, residencial, corporativo)
  • Clima: este elemento incorpora una amplia gama de consideraciones que incluyen el uso de energía (conceptos de construcción ecológica), la iluminación natural, el uso del agua y la orientación solar.

El diseño arquitectónico debe considerarse en su contexto relacionado con la ubicación, el tiempo y el espacio previstos. Un buen diseño solo es bueno para una aplicación de uso específico de una vez: la repetición en otro lugar sin cambios o modificaciones no logrará el mismo resultado exitoso. Junto con esta consideración, uno debe darse cuenta de que no existe una solución de diseño aislada, ya que siempre hay un elemento contextual presente. Una solución de diseño que se completa en relación con su aplicación contextual es más probable que sea aceptada (juzgada) según corresponda. Una solución de diseño completada en contraste con su contexto debe hacerse con intención.

La tarea consiste en abordar el problema del diseño en todos los niveles, teniendo en cuenta la aplicación de los principios de diseño, para resolver por completo una solución exitosa.

Siempre diseñe algo considerándolo en su siguiente contexto más amplio: una silla en una habitación, una habitación en una casa, una casa en un ambiente y un ambiente en un plan de la ciudad. Eliel saarinen, citado en the nature of design

Paisajismo y diseño arquitectónico

El diseño arquitectónico es un proceso que involucra el diseño de la estructura y el contexto circundante. Los elementos de paisajismo adyacentes o previos a una solución de diseño contribuyen en gran medida a la percepción del usuario sobre el orden, el patrón y el desarrollo. El diseño debe esforzarse por crear una transición entre los espacios interiores y exteriores, unificando la composición general en una estructura completa y combinada con el entorno. Sin este esfuerzo, la estructura queda desnuda sobre el sitio como una roca que cae sobre el suelo endurecido.

Se sigue que un edificio que es completo siempre debe tener también el carácter de naturaleza. Tendrá el mismo equilibrio de repetición y variedad que la naturaleza.

El elemento relacionado con el diseño e integración del paisaje es el mismo que los revisados ​​en esta sección en relación con los principios y elementos del diseño arquitectónico.

El diseño del paisaje implica:

  • Línea para establecer el flujo y la geometría (natural o rígida) en el sitio
  • Horizontalidad proporcionada por superficies para caminar, muros de tierra, setos y arbustos
  • Verticalidad proporcionada por los árboles y los elementos del sitio construido
  • Textura proporcionada por las plantas y las superficies materiales
  • Variedad en elementos construidos y vida vegetal
  • Unidad proporcionada por materiales, formas y texturas consistentes y complementarias.
  • Repetición en formas, formas, color y textura
  • Patrón que proporciona un ritmo visual y cadencia para el movimiento
  • Énfasis para los puntos focales y la estructura misma.
  • Equilibrio entre elementos del sitio, estructura, color, textura, masa, proporción y escala.
  • Los elementos construidos del sitio brindan la oportunidad de reflejar la estructura alrededor del sitio, reforzando el simbolismo y las imágenes, agregando color, línea y forma, así como el movimiento de la línea alrededor y dentro del sitio. El color es un aspecto específico que debe considerarse en relación con su impacto en todas las estaciones (verano a invierno) con el fin de proporcionar un sitio consistente en relación con la estructura.

El proceso de diseño del paisaje forma un componente distintivo de la profesión del diseño. El arquitecto de diseño debe entender e implementar esta com de arquitectura del paisaje a través del concepto para garantizar que la estructura completa sea una composición integrada total dentro y alrededor de sí misma.

Creemos firmemente que para que un edificio sea sostenible, debe ser amado; debe tocar el alma las personas, no solo los propietarios actuales, sino las generaciones futuras, deben encontrar el valor suficiente en un edificio para seguir ocupándolo y manteniéndolo. Algo de esto es estético, algo de rendimiento y algo de economía. El arquitecto romano vitruvio nos dijo que los edificios deben tener "firmeza, mercancía y deleite". Verdad hoy más que nunca.

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